Este trabajo bautizado como Xbook One S toma todos los componentes de la consola y los adapta a un nuevo formato, donde se incluye un rediseño en la carcasa y una pantalla con bisagras para plegarla cuando no estemos jugando, lo que hace que no necesitemos estar conectados a un televisor en todo momento.La pantalla tiene un tamaño de 19 pulgadas y una resolución 720p, algo que queda por debajo de la resolución que puede mover esta nueva consola, que en esta versión incorpora vídeo en 4K, por fortuna se mantiene la salida HDMI 4K para poderla a conectar a un televisor compatible. Contrario a lo que podríamos pensar, esta Xbook One S no es completamente portátil, ya que la fuente de alimentación interna requiere que esté conectada a la energía en todo momento.
Si les atrae este tipo de modificación y creen que se adaptaría a sus necesidades gamer, Edward la tiene a la venta por 1.495 dólares directo en su página web. Si les pareció interesante el trabajo realizado por Edward, cabe destacar que no es la primera vez que realiza un trabajo de este tipo, ya que ha hecho lo mismo con la Xbox One, la Playstation 4, e incluso hizo un frankenstein donde mezcla ambas consolas a la que bautizó como PlayBox 4 One. A continuación pueden ver los vídeos de estas interesantes modificaciones.Qué mal lo están pasando las empresas japonesas que hacen portátiles. En un tiempo fueron líderes en tecnología y diseño, creando los equipos que todos queríamos tener, muchas veces como grandes alternativas a los dispositivos de Apple, pero la realidad es que a ninguna le ha sentado bien la nueva época más orientada al negocio móvil.
El caso más sonado fue el de la separación del negocio VAIO de la todopoderosa Sony, una marca bien valorada que ha tenido que pasar a sobrevivir sola, principalmente orientada al mercado japonés. Hemos visto su “resurrección” en portátiles, también sus primeros pasos con teléfonos con los sistemas operativos Windows 10 y Android.Hoy os mostramos como la marca sigue dando bastante calor en su archipiélago de nacimiento, donde ha presentado un nuevo modelo llamado VAIO C15. Su principal punto de venta ya lo podéis ver en imágenes, su colorido y llamativo aspecto.
Creada por Adafruit, se hizo relativamente famosa en la web, y ahora tiene un nuevo familiar que os queremos presentar: PiGRRL Zero, que también llega con la misma filosofía DIY. Como podéis adivinar, aquí la placa es una Raspberry Pi Zero. Sí, la placa de los 5 dólares.Obviamente vamos a necesitar muchas cosas más además de la destreza para soldar y entender un poco de electrónica. Nos hace falta una pantalla, una batería, adaptadores, una carcasa impresa en 3D, y botones. Hay una guía 'paso a paso' bastante completa para que no nos perdamos, si es que nos da por meternos en la aventura de crear esta consola portátil.
La pantalla es pequeña, como se puede intuir en las imágenes. Se trata de un panel Adafruit PiTFT de 2,2 pulgadas, con una resolución de 320x240 píxeles. Unas características ideales para cargar Retropie 3.7 Emulation Station, que nos abre las puertas de SNES, NES, Megadrive, incluso N64. La batería es de 2.000mAh.La pequeña consola deja libre un puerto USB hembra, a través de él podemos darle un juego interesante a Raspberry Pi Zero, como añadir periféricos: adaptadores WiFi o Bluetooth, teclados o un hub USB. En total tenemos catorce botones, contando el pad direccional, gatillos, botones de selección y cuatro botones de juego, y un par de unidades 'extra'.
Poniéndonos serios, el resultado final es atractivo, pero no es una maravilla en ergonomía, ya que con el DIY no podemos llegar con facilidad al nivel de miniaturización que tendría un fabricante. Nos gusta más el formato apaisado de esta nueva PiGRRL, la anterior tiraba por parecerse a una GameBoy original.Comprar un portátil hace unos años era una tarea relativamente sencilla. Había pocas referencias, y estaban categorizadas de un modo claro y diferenciado de acuerdo a criterios como la integración del DVD, o el tamaño y el peso.De hecho, una categoría era la de los “thin and light” (delgados y ligeros) y otra la de los “desktop replacement” (sustituto del ordenador de sobremesa). Hoy en día, prácticamente todos los portátiles puedes ser “desktop replacement” al tiempo que “thin and light”.
En este momento, comprar un portátil puede convertirse en una de las decisiones más complejas que se puedan tomar. Hay centenares de referencias, muchas de ellas extremadamente similares que hacen que acabemos saturados y desorientados a los pocos minutos de estar en una tienda o de explorar páginas de venta online.
En no pocas ocasiones, la solución pasa por preguntar al amigo “techie”. Casi siempre tenemos a nuestro alrededor a un amigo, o el amigo de un amigo, que sabe de tecnología, al que (sin pudor alguno) trasladamos la pregunta del millón: ¿qué ordenador me compro?
Esta pregunta, con todo lo inocente que pueda parecer, está cargada de responsabilidad: lo fácil es recomendar el más caro, uno que resulte imposible que dé problemas de rendimiento, ergonomía, de robustez o incluso de estética. Algo así (no exactamente, pero algo así) como recomendar un Ferrari a una persona que nos pregunta qué coche comprar.Pero un amigo, o un amigo de un amigo, normalmente optará por dar una respuesta trabajada y a la medida de las necesidades de la persona que confía en nosotros para elegir su ordenador portátil.
Si te sientes cómodo con la tarea de recomendar un portátil, con un método personal para entender las necesidades de la persona que te pregunta al tiempo que seleccionas potenciales candidatos, genial. Si no es así, existen algunas normas generales que se pueden seguir para ir resolviendo incógnitas en esta ecuación.Lo primero, es usar la empatía. Ponerse en la piel de quien nos pregunta. Un “techie” suele ser más exigente que la media con su tecnología. Sabe cómo sacar partido a todas y cada una de las tecnologías de un equipo, y es exigente con ellas. Pero los usuarios de a pie no necesariamente tienen las mismas exigencias o necesidades.
Y además hay que contar con la variable financiera: no siempre se puede ni se desea invertir una cantidad elevada de dinero en un portátil.Esta es una buena forma de empezar el trabajo de prescriptor. El apartado económico es determinante para una buena elección. Si no tenemos una limitación en este apartado, la tarea se simplifica mucho y se reduce a responder a la segunda pregunta: “¿qué vas a hacer con el ordenador?”.Predator G9 791 Win10
Si se trata de un gamer, hay equipos con tarjetas gráficas dedicadas, teclados específicos para gaming y pantallas con una latencia mínima, por ejemplo. Para un usuario que viaja y está fuera de casa habitualmente, hay 2 en 1 o Ultrabooks con pesos mínimos, robustos y rendimientos notables.Pero si el presupuesto es limitado, entramos en un territorio donde es necesario tener en cuenta cada elemento del portátil y ponerlo en contexto para elegir la mejor opción dentro de los márgenes con los que podemos jugar.
En tecnología, muchas veces hay una relación directamente proporcional entre lo deseable y lo caro. Por ejemplo, si queremos un equipo con el máximo rendimiento y el mínimo de grosor, tendremos que pagar un precio muy alto por ello.Así que tendremos que renunciar a los extremos y quedarnos con las soluciones de compromiso, ajustando la elección a partir de la búsqueda de configuraciones óptimas en vez de ideales.Amazon Portatiles
Un presupuesto de 600 euros está asociado un uso generalista del equipo. No hay lugar para equipos orientados al gaming, ni a la movilidad extrema, ni para un rendimiento excepcional. Hay que dejar claro este punto al comprador. Pero ello no significa que no se puedan encontrar propuestas muy interesantes.
Con esos 600 euros nuestro objetivo será encontrar un portátil con un procesador por encima de un Core i3, Pentium, Celeron o un Core M. AMD tiene buenos procesadores, pero el máximo rendimiento por Vatio está en poder de Intel. Los Core i5 son una familia que encaja en el escenario de lo óptimo.Además, los Core i5 integran gráficos aptos para jugar, siempre y cuando no pidamos el máximo de calidad gráfica ni efectos cinemáticos avanzados.En cuanto a la memoria, 4 GB son una cantidad que empieza a ser anacrónica. En este caso, el punto dulce está en los 8 GB de RAM. Cantidad suficiente y óptima ahora y durante bastante tiempo para un uso convencional del portátil.
Para el disco duro, lo deseable es la tecnología SSD. Es rápida, robusta y fiable. Pero no es fácil encontrar este tipo de discos para un presupuesto por debajo de los 800 euros. Eso sí, un disco que no tenga menos de 128 GB, o tendremos problemas de espacio.