Neverware es una empresa que viene dispuesta a hacer esto posible con CloudReady, su propia versión de Chromium OS, el proyecto de código abierto en el que se basa Chrome OS. Ofrece dos versiones de su sistema operativo, una gratuita y básica y otra de pago enfocada al ámbito educacional y con algunas funciones extra. En Genbeta no hemos podido evitar probarlo para contaros cuales han sido nuestras primeras impresiones.
Pero antes de empezar, hay unas cuantas cosas que tienes que tener en cuenta sobre qué es lo que te vas a instalar. CloudReady no está basado en Chrome OS, sino en Chromium OS. Por lo tanto, aunque el aspecto, la experiencia y prácticamente todas las aplicaciones que utilizaremos son las mismas, hay algunas diferencias esenciales entre ambos sistemas.La primera de ellas está en la reproducción multimedia. Google ha invertido mucho tiempo en hacer que Chrome OS pueda reproducir de todo, pero muchos de los drivers que ha utilizado no han sido liberados en Chromium OS. Esto quiere decir que no podrás utilizar servicios como Netflix (mirad la captura), aunque en formatos como MP3 y MP4 no he encontrado problemas.
Tampoco podremos utilizar el comando Compartir en los archivos que estemos viendo dentro de la carpeta Google Drive de la aplicación nativa de Archivos, geolocalizarnos en páginas y aplicaciones, la función de traducir web de Chrome, compartir la pantalla o dibujar con Hangouts, utilizar el plugin nativo de Flash o instalar algunas apps de Android como en Chrome OS. Algunas de estas funciones aparecen, pero cuando intentamos efectuarlas se nos muestra un mensaje de error.Además, las actualizaciones de CloudReady siempre irán entre una y tres versiones por debajo de las de Chrome OS, no contaremos con la seguridad avanzada de los Chromebooks, y cabe la posibilidad de que dependiendo del hardware que tengamos algunas cosas no funcionen correctamente. Por ejemplo, en el caso del portátil MSI en el que he realizado las pruebas hay algunas teclas independientes y especiales que no funcionan.
Evidentemente, aunque nos aparecerá la opción de añadirle 100 GB extra a nuestro Google Drive por tener un Chromebook, tampoco estará habilitada y al pulsar sobre ella nos dirá que no puede realizarse. Lo que sí tendremos es soporte telefónico y la Google Management Console, aunque ambas cosas estarán disponible sólo si pagamos 60 dólares por la versión estudiantil.Pero pese a estas diferencias, la verdad es que el sistema funciona lo suficientemente bien como para que le demos una oportunidad. Por eso, primero vamos a explicaros su proceso de instalación y después pasaré directamente a contaros cuales han sido mis primeras impresiones.
Al haber resuelto el problema del peso de chasis, batería y discos convencionales, el resto de componentes del Toshiba Portégé Z30 se integran de manera perfecta para conseguir esa cota mágica de 1,2 Kg en una herramienta profesional.En el interior late el procesador Intel Core i5 de cuarta generación con tecnología Turbo Boost 2.0, con una velocidad de reloj de 1.60 GHz (2.60 GHz en modo Turbo). Este procesador disipa menos calor que sus predecesores, por lo que su inclusión evita la necesidad de incorporar un sistema de refrigeración de buen tamaño y peso. A este potente corazón le acompañan 8 GB de RAM en un solo módulo (soporta hasta 16 GB en dos módulos).
El adaptador gráfico Intel HD Graphics 4400 proporciona una resolución de 1.366x768 píxeles a la delgada pantalla anti-reflectante del equipo, aunque puede llegar a los 1920x1080 píxeles conectado a una pantalla externa.El teclado de 86 teclas, con iluminación posterior, del Toshiba Portégé Z30 es ligero, agradable al tacto y apto para duras sesiones de trabajo en el entorno profesional. Varias de sus teclas son de doble función, pudiendo acceder a todas las prestaciones del equipo con comodidad.Los distintos testigos luminosos de este portátil son discretos, siendo visibles sin molestar. En el centro del teclado dispone de Accupoint (dispositivo señalador), además de Touch Pad. El marco superior de la pantalla alberga una webcam de 2MP (1980x1080) y micrófono estéreo integrado. El sonido se confía a dos discretos altavoces, que proporcionan una experiencia sonora de calidad.
La capacidad de comunicación del equipo es la que se espera de una máquina apta para el cliente profesional: WiFi 802.11ac, a/b/g/n, Bluetooth 4.0 + LE (Low Energy), y Gigabit Ethernet LAN (velocidades 10BASE-T / 100BASE-TX / 1000BASE-T).En cuanto a interfaces de conexión, en el Toshiba Portégé Z30 todos los conectores son de tamaño estándar, no siendo necesario ningún tipo de adaptador. Este portátil se puede conectar a una pantalla externa mediante conector D-sub, dispone de salida HDMI (soporta 1080p), RJ-45 para redes cableadas, Multicard Reader y tres puertos USB 3.0 (el izquierdo con función Sleep-and-Charge). En la base tiene también el denominado Toshiba Hi-Speed Port Replicator III (conector para Dock).
El Surface 3 apareció como la versión "para todos los públicos del Surface Pro 3. Basado en un Intel Atom x7-8700, este tablet convertible ofrecía una alternativa más modesta y económica en un segmento en el que Microsoft ha apostado fuerte desde hace años.Ahora nos llega la noticia de que Microsoft dejará de fabricar el equipo en diciembre, y la pregunta es obvia: ¿habrá sucesor de este modelo? Las dudas al respecto son importantes ahora que Intel ha decidido que el desarrollo de nuevos Atom cesará casi por completo.Cuando analizamos el Surface 3 ya adelantamos que este equipo era una buena alternativa para usuarios móviles -aunque siguiera sin poder ser un reemplazo completo de un portátil-, sobre todo porque por ese precio uno podía acceder a una notable pantalla en ese interesante formato 3:2 y a unas prestaciones destacables.
A priori no parece probable que vayamos a ver un sustituo para este equipo: los rumores más recientes hablaban de la inminente aparición del Surface Book 2, pero parece que tendremos que esperar algún tiempo a ver ese nuevo modelo. Dado que los Apollo Lake están más orientados a tablets puros y que los Core M encarecerían demasiado el precio de esos hipotéticos "Surface 4", el futuro de esta familia parece ser comprometido.El pasado CES de Las Vegas sirvió para dar algo de vida a una tendencia que podría no tener muchas opciones. Se trata de los equipos duales Android-Windows, que varios fabricantes parecían apoyar con propuestas que trataban de convencer tanto en PCs de sobremesa como en portátiles.
ASUS fue una de las más implicadas en ese esfuerzo, como demostró con su equipo Transformer Book Duet TD300. Sin embargo, presiones combinadas de Microsoft y Google podrían hacer que dicho dispositivo jamás llegase al mercado. Según el Wall Street Journal, Microsoft ha anunciado una "nueva política" que hará que no den soporte a sistemas de arranque dual, y aunque ni Google ni la empresa de Redmond han querido confirmar o desmentir estos informes, no parece que ninguna de ellas parezca muy contenta con este tipo de soluciones.ASUS tampoco ofreció comentarios a la noticia del WSJ, pero los rumores ya se habían comentado en Digitimes hace una semana. De hecho, en el Journal indican que los PCs Todo-En-Uno de ASUS que ya ofrecían dicha capacidad, los P1801 y los P1802, también suspenderán su fabricación y puesta a la venta.
La realidad virtual necesita mejores métodos de interacción, no solo de visualización. Es un hecho que cada día que pasa hay mejores gafas, también la potencia gráfica de proceso se democratiza, e incluso inventan equipos portátiles que colgarnos a las espaldas. ¿Pero qué hay de los sistemas de control?Pues hay cositas interesante como mandos de control que reconocen nuestra posición en el espacio y la representan en el mundo virtual, pero creemos que también hay espacio para periféricos especiales, que nos ayuden a introducirnos a un nivel más importante en la experiencia. Futuretown no solo piensa lo mismo, ha creado un sistema modular llamado Totalmotion que va a dar mucho que hablar.Es una startup taiwanesa que está haciendo conocida en el planeta electrónico gracias a su aparición en el Tokyo Game Show, donde se llevó el citado periférico y una serie de juegos para que la gente viera lo que se podía hacer con él. En principio no se casan con ninguna firma de cascos de realidad virtual, y eso que entre sus fundadores está Peter Chou, antes mandamás en HTC.