Obtendremos una enorme potencia en un equipo ligero. Como podéis comprobar más adelante en los benchmarks que hemos utilizado, su rendimiento se posiciona en la cabecera de nuestras tablas de resultados en la mayoría de ocasiones tanto en entornos reales (videojuegos) como en pruebas sintéticas.MSI continúa apostando por utilizar la tecnología de SteelSeries para sus teclados, y esto es sin duda un gran acierto. Lo comprobamos en el GS70 y también en el más 'gordito' GE60 con los mismos resultados: para mi es uno de los mejores teclados que podemos encontrar en el mercado portátil, siendo cómodo, rápido y eficaz. El trackpad, por su parte, también está bastante bien aunque no le prestaremos gran atención, dando por hecho que la mayoría de usuarios que están interesados en un portátil para jugar adquirirán un ratón para tal labor.
Las dimensiones acto de presencia rápidamente, desde el primer momento en el que sacamos el equipo de la caja. En todo momento somos conscientes de lo delgado y ligero que es MSI GS60 en comparación con la mayoría de equipos gaming, siendo relativamente pequeña su competencia y estando ésta liderada por el Razer Blade (lamentablemente no disponible en España a través de los canales oficiales). Si lo que buscas es una gran portabilidad unida a un alto rendimiento, MSI tiene en el mercado algunas opciones que seguramente te satisfarán.Dentro de las características que incluye el modelo probado destaca sobremanera el uso de un panel LED de 15,6 pulgadas con resolución 3K, dando lugar a una densidad de unos 212 ppp. Lejos de lo que proponen los smartphones pero muy superior a lo habitual en portátiles.
Siendo una característica innovadora (hay que reconocer que son pocos los ordenadores que utilizan resoluciones más allá de FullHD) es necesario mencionarla con el protagonismo que se merece. En nuestro caso la experiencia ha tenido más aspectos negativos que positivos, con un mayor número de desventajas que relataremos a continuación.La primera y de mayor envergadura es que mucho software no está aún preparado para las altas resoluciones que empiezan a moverse en el mercado, refiriéndome tanto al 3K como al superior 4K. Más adelante, en los resultados de las pruebas, veréis que algunos benchmarks y varios videojuegos no han podido iniciarse correctamente en un problema que afecta tanto al fabricante del apartado gráfico (en este caso NVidia, encargada de desarrollar los controladores) como a la compañía creadora del programa (Futuremark en el caso de 3DMark; EA/DICE en los Battlefield).
Otro problema relacionado con la resolución es que también se dan algunos casos en los que el juego se ejecuta, pero su interfaz es excesivamente pequeña y hace inviable disfrutar de una buena partida. Nos ha ocurrido con Los Sims 4 y Civilization más modernos, siendo necesario reducir su resolución a 1920x1080 píxeles (la comúnmente denominada FullHD) para volver a la normalidad. Con estas 'pegas' las pantallas 3K o 4K pierden el sentido y denota que estamos ante una tecnología que aún tiene que madurar más, siendo necesario nuevas versiones tanto de los controladores gráficos como de cada uno de los videojuegos.
Si nos centramos en cómo se mueve Windows en estas resoluciones inicialmente nos sorprenderemos de lo pequeño que son todos los elementos. Por ejemplo, la siguiente captura de pantalla muestra cómo se ve Xataka en 3K con la configuración por defecto, y cómo sería ideal que se viese en este tipo de pantallas de tan alta resolución (simplemente hemos aplicado varias veces un 'zoom'):
Arriba en la configuración 'por defecto'; abajo, como entendemos debería verse
Esto es muy palpable en la navegación web (donde los diseñadores de cada página deberán adaptarse a las nuevas resoluciones) pero también en el sistema en general. El principal resultado son interfaces con texto, botones u opciones exageradamente pequeños (Origin, Battle.net) que es muy difícil manejar eficientemente. Una vez más, otro claro ejemplo de que el software no está aún adaptado a este tipo de tecnología.
Afortunadamente Microsoft, consciente del problema, ha implementado su sistema de reescalado que permite ajustar como buenamente puede algunos elementos, como los menús, el Explorador de Archivos y demás aplicaciones propias. En software de terceros, eso sí, seguiremos teniendo los mismos problemas.
En definitiva, lo de resoluciones de la magnitud de 3K o 4K está muy bien es sin duda alguna un importante avance que muchos llevábamos exigiendo desde hace varios años, pero hay que reconocer que es una tecnología aún demasiado verde como para adentrase en ella. Es algo que afortunadamente es una simple cuestión de software y, por tanto, confiamos en que las partes implicadas lo vayan solucionando durante los próximos meses.
A día de hoy es inevitable pensar que un equipo de gama alta debe tener un SSD en su interior para lograr un rendimiento máximo. Incluso las gamas medias empiezan a tenerlos, y por supuesto el MSI GS60 no iba a ser una excepción.En el caso del modelo probado, todas las configuraciones que se venden en España disponen de un RAID 0 de SSD que podemos definir como la evolución del SSD individual. Llegaremos a casi duplicar las tasas de transferencia respecto de este último, y a multiplicar casi por diez lo que podemos obtener de un disco duro mecánico más tradicional.Analizando los números resultado de las pruebas ejecutadas vemos cómo MSI GS60 se posiciona en la cabeza de los benchmarks de almacenamiento, rondando el gigabyte por segundo según el software. Esto repercute en que tanto el sistema como las aplicaciones se ejecutan de forma instantánea o en tiempos reducidísimos, con latencias casi imperceptibles para el usuario.
El GS60 que hemos probado incluye, además del RAID 0 de SSD (cada uno de 128 GB, resultando en un total de 256 GB bajo esta velocidad) un disco duro mecánico de 2,5 pulgadas, 7.200 rpm. de Hitachi, con el que no deberíamos tener problemas de espacio libre. No será tan rápido, pero esta solución mixta es perfecta para combinar la velocidad del almacenamiento flash con la capacidad de lo mecánico, siempre que tengamos un cierto orden en nuestros ficheros y sepamos priorizar cada archivo.La moda de la resolución UHD (que no 4K) en todo tipo de pantallas ha migrado de los sobremesas a los portátiles. Primero fue Toshiba, y ahora Acer le sigue la estela con su Acer V Nitro Black Edition, un equipo que destaca por su pantalla de 15,6 pulgadas y la citada resolución de 3.840 x 2.160 píxeles.Este equipo está configurado con un procesador Intel Core i7-4710HQ y con una gráfica más que prometedora, una GeForce GTX860M capaz de garantizar una buena experiencia con esa resolución, pero las especificaciones de este equipo de altos vuelos no se quedan ahí.
De hecho, en Acer completan el conjunto con 16 GB de memoria RAM, 256 GB en una unidad SSD, 1 TB de disco duro adicional y conectividad WiFi dual (en las bandas de los 2,4 y los 5 GHz). El Acer V Nitro Black Edition cuenta además con cuatro altavoces (con una potencia total de 8 W) y con soporte para la tecnología Dolby Digital Plus Home Theater.El equipo estará disponible a mediados de este mes en Estados Unidos, pero no hay fechas para su venta en otros países. Lo que sí conocemos es su precio, que será de 1.500 dólares y que no parece demasiado elevado con esas especificaciones.La duda que surge es si esa resolución realmente marca la diferencia en una pantalla de tan solo 15,6 pulgadas. Como ocurre con las resolución 2K en smartphones y phablets, la cuestión se presta a debate, aunque nuestras impresiones con el equipo de Toshiba, que ya pudimos tener en nuestras manos, parecen despejar esas dudas.