Esta vulnerabilidad podr¨ªa ser aprovechada para que el atacante descargase malware en el ordenador remoto de la v¨ªctima y a partir de ah¨ª tomar control de ese equipo. Varios de los fabricantes aseguran tener ya un parche para el problema mientras que otras como Lenovo admiten que tendr¨¢n que reemplazar este tipo de soluciones porque no ofrecen actualizaciones para dichos perif¨¦ricos.Unif
En nuestras pruebas con un receptor Unifying de Logitech hemos comprobado c¨®mo esa actualizaci¨®n no parece estar disponible: el software con versi¨®n 012.003.00025 est¨¢ afectado por el problema seg¨²n Bastille, pero no hay versiones superiores de este componente.
El jugar a port¨¢til y tablet derivaba, en el caso del Surface Pro, a hacer sacrificios en alguno de los dos lados a la hora de plantear el dispositivo. Si apostabas por ser competitivo como port¨¢til ten¨ªas el problema de acabar con un tablet grueso, que disipa mucho calor y pesado.COMO DISPOSITIVO LA NUEVA SURFACE PRO ES UN ESTUPENDO PORTÁTIL PARA LLEVAR A TODOS LADOS, NO SÓLO LIGERO Y FINO, ES UN CACHARRO REALMENTE BIEN DISEÑADO; COMO TABLET ENCAJA BASTANTE BIEN EN UN CONCEPTO DE TABLET GRANDE CON MÁS PRETENSIONES QUE LA DE SER PANTALLA DE CONSUMO
Si, como otros, apostabas por ser competitivo como tablet con un dispositivo ligero, delgado y con micros que no necesitaran apenas ventilaci¨®n te quedabas corto de potencia, con una m¨¢quina que lastraba la productividad.
Microsoft con la gama Pro siempre ha dado prioridad al lado port¨¢til, mientras atacaban a la gama tablet con la versi¨®n Surface sin apellidos o con la original RT. Es as¨ª como lo vienen presentando y con quienes se comparan en el mercado, por muchos debates que queramos tener sobre si fue antes el huevo (port¨¢til) o la gallina (tablet).
El caso es que con Pro 4 Microsoft ha conseguido unas dimensiones en cuanto a grosor (apenas 8.4 mm) y peso (entre los 766 y los 786 gramos seg¨²n la configuraci¨®n, sin contar la Type Cover) que rompen esta necesidad de elegir: como dispositivo la nueva Surface Pro es un estupendo port¨¢til para llevar a todos lados, no s¨®lo ligero y fino, es un cacharro realmente bien diseñado; como tablet encaja bastante bien en un concepto de tablet grande con m¨¢s pretensiones que la de ser pantalla de consumo.
La versi¨®n que hemos analizado (con un micro i5 y ocho gigas de RAM) ha costado mucho llevarla a un cierto calentamiento, pero cuando lo hemos logrado s¨ª que ha resultado algo inc¨®modo. Microsoft apunta a un sistema de refrigeraci¨®n h¨ªbrido: uno pasivo que se encargar de repartir el calor por todo el chasis cuando no ponemos la CPU al m¨¢ximo y con el que se consigue mucho menos ruido; otro activo que se enciende cuando se llega a cierto nivel de calor, m¨¢s ruidoso y que s¨®lo hemos conseguido notar en videojuegos y, eso s¨ª, cuando alg¨²n proceso de Windows se ha quedado atascado consumiendo recursos.En esto hay una parte que tenemos que reconocer a Intel el trabajo con Skylake y a Microsoft por saber esperar y saltarse Broadwell, buena decisi¨®n.
Continua siendo marca de la casa el cada vez m¨¢s imitado kickstand, que con su flexibilidad de ¨¢ngulos soportados consigue que nos podamos olvidar de perder ¨¢ngulos de trabajo frente a un port¨¢til de factor forma tradicional. Si te toca trabajar viajando en tren o avi¨®n lo agradecer¨¢s mucho frente a propuestas que limitan a una ¨²nica posici¨®n de ¨¢ngulo de pantalla.
Tenemos tambi¨¦n el lateral magn¨¦tico, para emparejar el l¨¢piz al dispositivo minimizando en parte la p¨¦rdida del mismo... y digo en parte porque si no hay oquedad hay que asumir que el l¨¢piz mejor llevarlo a buen recaudo porque siempre tendremos la posibilidad de que por cualquier roce imprevisto caiga. Hay un puerto USB 3.0 (nada de Type C), que en ocasiones se queda corto, al menos frente a lo que ofrece el t¨ªpico port¨¢til.
LA PANTALLA DEL NUEVO SURFACE PRO 4 ES FÁCIL DE RESUMIR: UNA PASADA. POR BRILLO, CONTRASTE, FIDELIDAD DE COLOR Y RESOLUCIÓN
Un ¨²ltimo apunte, el conector propietario tiene la costumbre de desprenderse cuando movemos el dispositivo con cierta facilidad, as¨ª que dueños de un Surface Pro 4: vigilen bien que luego se llevan la sorpresa al creer que estaban cargando y no. Eso s¨ª, que en el cargador se incluya una salida para cargar por USB cualquier m¨®vil o similar sigue siendo un acierto tan claro que no entiendo como el resto de la industria no lo est¨¢ copiando ya.
La pantalla del nuevo Surface Pro 4 es f¨¢cil de resumir: una pasada. Por brillo, contraste, fidelidad de color y resoluci¨®n. Los blancos realmente blancos, los negros muy negros, una gran experiencia sin perderse en esa tendencia a la saturaci¨®n.MI ÚNICA DUDA RESPECTO A LA PANTALLA ES SI ES DEMASIADO BUENA: UNA RESOLUCIÓN MENOR Y MENOS PÍXELES POR PULGADAS NOS HUBIERAN LLEVADO A MENOS CONSUMO Y CREO QUE MUCHOS USUARIOS LO HUBIÉSEMOS PREFERIDO
Uno de los aspectos mejor trabajados en el diseño del producto es la superficie de pantalla en este tamaño de dispositivo. 12.3 pulgadas, un poco m¨¢s grande que la de su antecesor, que nos deja un marco con el tamaño perfecto para funcionar bien como tablet: cuando lo tenemos sujeto con una mano necesitamos un m¨ªnimo de grosor para que ese agarrar no interfiera en la experiencia t¨¢ctil.
Nos hemos ido con el Pro 4 a una resoluci¨®n de 2736x1824 mientras que el ratio es 3:2 (ojo, para el consumo multimedia no es precisamente el m¨¢s indicado) y a una densidad de 267 p¨ªxeles por pulgada. Mi ¨²nica duda es si la pantalla es demasiado buena: una resoluci¨®n menor y menos p¨ªxeles por pulgadas nos hubieran llevado a menos consumo y creo que muchos usuarios lo hubi¨¦semos preferido.
Una vez encendido nos encontramos son Windows 10, del que hemos hablado tanto en an¨¢lisis a fondo (aqu¨ª me atrever¨ªa a hablar de an¨¢lisis a fond¨ªsimo) y en la experiencia tras un mes de uso que poco cabe añadir: parece un sistema diseñado ex profeso para la filosof¨ªa Surface Pro, primero port¨¢til y actor secundario tablet.
Puestos a trabajar con el Surface Pro 4 lo primero que hay que asumir es que este dispositivo no tiene sentido sin su complemento por excelencia: la type cover.Mucho ha mejorado el teclado, ahora la respuesta es muy buena, hay espacio entre las teclas y mantienen las dos posiciones (plano y con cierta inclinaci¨®n). Para escribir un gran paso que coloca a la Pro 4 al nivel de port¨¢tiles de gama alta de tamaño similar, aunque sin mesa donde apoyarlo sigue perdiendo un poco cuando lo tenemos sobre las piernas y toca trabajar de esa forma.
Tambi¨¦n hab¨ªa mucho que probar ante el anuncio de que el trackpad es m¨¢s grande y con mejor respuesta, a lo que sumamos los gestos en Windows 10 (alguno no lo he conseguido reproducir). El resultado, tiene raz¨®n Microsoft, es una mejora apreciable respecto a lo que hab¨ªan hecho hasta ahora pero.... siguen un peldaño por debajo del trackpad de un port¨¢til de gama alta y dos por debajo de quien mejor hacer esto en el sector: Apple.
LA EVALUACIÓN DE LA EXPERIENCIA CON EL INTERFAZ HACIA EL DISPOSITIVO SI TENEMOS EN CUENTA TODAS LAS POSIBILIDADES ES DE NOTABLE ALTO: SÓLO SI UNO QUIERE PRIORIZAR DE FORMA ABSOLUTA EL TRACKPAD DEBERÍA PENALIZAR AL SURFACE PRO 4
Sin embargo toca romper una lanza por Surface, Windows 10 y el la idea de interfaz t¨¢ctil. Conforme uno se hace a ellos empieza a descubrir que hay muchos contextos en los que lo mejor es un mezcla de uso de trackpad y uso t¨¢ctil del dispositivo. Cierto que en el modo cl¨¢sico de Windows 10 los elementos suelen ser muy pequeños, diseñados para una interacci¨®n con rat¨®n o trackpad, pero hay muchos contextos en los que la parte t¨¢ctil tiene sentido y mejora la experiencia: desde el scroll al navegar una web hasta el modo de tablet de Windows 10.
Por tanto, la evaluaci¨®n de la experiencia con el interfaz hacia el dispositivo si tenemos en cuenta todas las posibilidades es de notable alto: s¨®lo si uno quiere priorizar de forma absoluta el trackpad deber¨ªa penalizar al Surface Pro 4.
Por supuesto no podemos olvidarnos del l¨¢piz. En su aspecto funcional fundamental - escribir y dibujar - sigue siendo una virguer¨ªa: han aumentado los niveles de presi¨®n que detecta hasta 1024 y mantienen la apuesta por la tecnolog¨ªa N-Trig (respecto a los antiguos Wacom lo que se consigue es llevar m¨¢s tecnolog¨ªa al l¨¢piz y eliminar de la pantalla, algo importante de cara al grosor).Lo m¨¢s interesante en todo caso con el nuevo l¨¢piz est¨¢ en la goma que añade nuevos m¨¦todos de interacci¨®n: un click y se enciende OneNote, dos clicks y hace captura de pantalla y la mete como nota en OneNote, tres clicks y aparece Cortana. Aunque uno se ha entregado a los brazos de OneNote (en mi opini¨®n muy superior a Evernote a d¨ªa de hoy), en el camino de Microsoft de cada vez mayor integraci¨®n con sus servicios cabe anotar que mejora la experiencia pero araña un poco m¨¢s al ecosistema.
Tambi¨¦n hemos probado el dock, algo que en un producto como el Surface Pro 4 tiene todo el sentido y que lo diferencia de otras propuestas del tipo tablet para trabajar. Con la potencia de dispositivo como este (obviando quiz¨¢s la versi¨®n con intel core m3), hay muchos perfiles de usuario que no van a necesitar m¨¢s en el puesto de trabajo: en estos casos el dock que Microsoft ha preparado cumple a la perfecci¨®n ofreciendo todos los puertos que podemos necesitar. No es inal¨¢mbrico como el dock de HP (mi favorito de la industria) y tiene un conector propietario al que han bautizado con el original nombre de Surface Connect.